Dani Maza fue el primer esquiador español en hacer Heliski en esta isla salvaje e indómita. Desde entonces, no hemos dejado de regresar cada temporada, con nuestra salida anual que se ha convertido en tradición.
En Islandia, el Heliski se realiza principalmente en la península de Troll, con descensos que van desde los 1.200 m hasta el nivel del mar. La primavera ofrece una ventana única: nieve polvo en las cotas altas y visibilidad perfecta gracias al sol de medianoche. Se esquía con vistas al océano Ártico, en laderas solitarias y sin huellas. La logística requiere helicópteros ligeros y guías con conocimiento profundo del terreno volcánico y cambiante. La combinación de mar, glaciares activos y cultura vikinga hacen de Islandia un destino de Heliski completamente diferente.