Zermatt, Valais
El magnetismo del Matterhorn
Sobre el Resort
Ubicado en el Valais Suizo, Zermatt es uno de los destinos de esquí mas conocidos y reconocidos del mundo. Por su inmensa superficie, con pistas e itinerarios de todo tipo. Por su variada red de telesillas, telecabinas, teleféricos, funiculares e incluso tren. Por el encanto de su pueblo, sin tráfico.
Y por encima de todo ello, por el magnetismo del Matterhorn. La montaña perfecta.
Opinión del Experto
No es necesario que seas esquiador, ni siquiera que te guste la montaña. La imponente pirámide de 4.478 m ejerce una atracción irresistible sobre todo aquel que visita Zermatt. El Matterhorn ocupa un lugar preeminente en el paisaje desde prácticamente cualquier lugar del vasto dominio esquiable, sobresaliendo del skyline alpino de esta espectacular zona del Valais suizo en el que hay hasta 38 cumbres de más de 4.000 metros.
El terreno es inmenso e infinitamente variado. Desde la zona de Rothorn, en el extremo Este, hasta el glaciar de Theodul, al que se accede con el vertiginoso teleférico del Klein Matterhorn, infinidad de recorridos de todos los niveles nos permiten disfrutar de una experiencia única. Son 200 km de pistas, que llegan hasta 360 si incluimos la vecina estación italiana de Cervinia.
No podemos dejar de esquiar en la zona de Gornergrat y subir al observatorio, a 3.089m, en el tren de cremallera. El paisaje es de postal, con el tren ascendiendo lentamente en un entorno completamente nevado y con el Matterhorn de fondo, por supuesto.
En cuanto al fuera-pista, es excelente. Lo mejor es contratar los servicios de un guía para que nos enseñe los mejores descensos del dominio, con seguridad y sin perder el tiempo.
El pueblo es una preciosa localidad peatonal, donde además de disponer de alojamientos y servicios de todo tipo, destacan las tiendas de lujo y joyerías de su calle principal.
Dos cifras: más de 50 restaurantes de montaña y más de 100 restaurantes en el pueblo, para todos los gustos. No dejes de probar el Rösti, plato típico a base de patata recubierta con queso, salmón, bacon, huevo…
Por todo ello, por su atmósfera única y la calidad de su esquí, de todas las estaciones que he conocido, Zermat es mi favorita.
Curro Bultó, esquiador y socio en Kaihópara
ZONA: Europa
PAIS: Suiza
FECHAS: 26/Nov/22 a 29/Abr/2023
Lo más destacado
- La omnipresente imagen del Matterhorn, la montaña perfecta
- Un dominio esquiable inacabable y muy variado
- La belleza del entorno
- Localidad peatonal, sin coches
- El tren de cremallera de Gornergrat
Fotos del Resort
No podemos dejar de subir, con el ascensor, al mirador que hay en la cumbre del Klein Matterhorn. Situado a 3.883m, es el más alto de los Alpes. La vista es, sencillamente, indescriptible.
1 Superpipe & 1 Freestyle-park «Snowpark Zermatt»
Esquí de verano en el glaciar de Theodul y el Plateau Rosa
Recomendamos combinar el vuelo -a Ginebra o mejor, a Zúrich- con el tren, fácilmente enlazable en el mismo aeropuerto y que durante tres horas nos lleva cómodamente a través del corazón de Suiza hasta la localidad de Visp. Allí montaremos en el cremallera que, con una puntualidad realmente suiza -no más de dos minutos de intervalo entre ambos trenes- saldrá hacia Zermatt, recorriendo durante casi una hora un impresionante valle rodeado de enormes paredes verticales.
Zermatt invita a pasear. Podemos acercarnos al puente que pasa sobre el rio, en la Kirchstrasse, y hacernos una foto con la magnífica silueta del Matterhorn de fondo. También la iglesia se merece una visita, así como el casco histórico (con establos del siglo XV) y los paseos vespertinos por la Banhofstrasse -la calle principal-, recreándose con los escaparates de las joyerías y tiendas de lujo.
La visita al museo de Zermatt, donde se explica la historia del pueblo y de la conquista del Matterhorn, es obligada.
No aconsejamos elegir Zermat si nuestra prioridad es la fiesta, porque la excelencia del dominio invita a esquiar todo lo posible. Pero si quieres vida nocturna también la encontrarás. Por la tarde puedes acercarte al Papperla Pub, para tomar unas cervezas al acabar el día. Esquiando, de regreso al pueblo desde Schwarzsee, no dejes de parar en el Hennu Stall (el Gallinero), un bar con mucha, mucha marcha.